Las dosis iniciales deben ser pequeñas. Se irán subiendo cada día hasta notar efectos sensoriales. Llegados a este punto, seguir tomando la dosis del día anterior en la que no se había notado ningún efecto.

Por la noche se puede tomar un poco más de dosis, pero durante el día únicamente dosis de refuerzo de, como máximo, la dosis nocturna.

Advertencia para conductores: a pesar de que estas dosis no afectan en modo alguno la capacidad de conducir, la legislación prevé que éstas pueden ser utilizadas como agravante judicial en caso de accidente.

Extractos de Cannabis

Existen diferentes opciones para preparar extractos de Cannabis “Marihuana”. Es preferible utilizar planta seca, para que no se deteriore el aceite por la humedad que contiene la planta fresca.

La parte utilizada de la planta son las flores (cogollos), ya que allí se concentran los principios activos. Pero si hay hoja, tampoco pasa nada. Sería interesante encontrar variedades ricas en CBD (cannabidiol), ya que éstas normalmente contienen más THC; procurar variedades de cannabis en las que el CBD sea lo más elevado posible, ya que es el componente con más propiedades antitumorales, analgésicas y antiinflamatorias. El THC es más psicoactivo, propiedad interesante para tratar falta de apetito y glaucoma. En la mayoría de enfermedades en las que se utiliza cannabis, es interesante la concentración de CBD.

 

Extracto con base de aceite

Es preferible utilizar aceite de oliva de máxima calidad (virgen extra, primera prensada). Picar la flor (en trocitos pequeños, no hacerla polvo) para poder extraer mejor los principios. Con la flor picada llenar un envase de cristal casi hasta arriba. Rellenar con aceite de oliva y tapar.

 

Extracción de las propiedades medicinales

Forma lenta: Dejar el susodicho envase dos meses en maceración a sol y serena; al aire libre, cubierto con papel opaco o dentro de una caja de cartón. Se tiene que calentar durante el día y refrescarse por la noche; tener cambios de temperatura. La luz natural no le puede tocar directamente. Durante estos dos meses, sería interesante agitar el envase cada tres días aproximadamente, para que se vayan mezclando los componentes. Pasado el tiempo de maceración, colar el aceite y ponerlo en un envase limpio y esterilizado. Mantenerlo completamente alejado de la luz para una mejor conservación.

Forma rápida: Si no se quiere esperar los dos meses y/o se necesita el preparado de manera urgente, se puede poner el mismo envase al baño maría durante dos horas. Después dejar dos o tres días en reposo e irlo removiendo varias veces al día. Pasado este proceso, colar y guardar en un recipiente, de la misma manera que en la extracción rápida.

Conservación y dosificación: Se conserva mejor la forma lenta porque el aceite no se ha calentado. Guardar siempre en lugar oscuro. Al ser aceite, se podrían añadir unas gotas de Vitamina líquida en base de aceite de oliva. Se usa como conservante y antioxidante.

La dosificación del aceite se haría de forma sublingual. No se pueden asignar un número de gotas concreto, ya que cada planta tiene diferente calidad y cantidad de principios activos y cada persona tiene una tolerancia diferente. Lo más usual es de 2 a 15 gotas, tres veces al día. Cada persona irá probando lentamente su nivel de tolerancia.

 

Extracto con alcohol o tinturas

Normalmente, los extractos con alcohol (también llamados tinturas) son más potentes que los realizados con aceite de oliva, porque el alcohol extrae con más facilidad los principios activos.

Muchas personas no toleran el alcohol o su enfermedad les impide consumirlo. En estos casos, lo tomarán con aceite de oliva. Y para hacerlo más potente y a la vez no ingerir tanto alcohol, se dejará evaporar a este último.

Se puede usar un alcohol seco de 40% (tequila, orujo…) o un alcohol de vino 96% SIEMPRE DE USO ALIMENTARIO. En el caso de hacerlo con el de 96%, dejarlo evaporar para reducir la concentración alcohólica. Será más potente, ya que quedarán más concentrados los principios activos, y se usarán menos gotas.

 

Este extracto se realizaría de la siguiente forma

Poner el envase de cristal casi lleno de flores picadas, llenar con el alcohol y cerrar. Aconsejable que no toque la luz. Este envase tiene que estar macerándose durante 30-40 días, removiéndose, a ser posible, cada 2-3. Pasado este tiempo, filtrar y guardar como se ha indicado anteriormente. Si hubiera prisa, tener en cuenta que a los diez días ya ha sacado bastantes propiedades.

Otra opción es hacer un macerado de 12-15 días, filtrar el alcohol en un segundo envase y con las mismas hierbas que quedan, añadir otra vez alcohol y dejar 12-15 días más. Y filtrar, añadiendo alcohol a la primera extracción, que ya teníamos hecha anteriormente, al segundo envase. En este caso, al realizar dos extracciones, habrá más cantidad de alcohol, ya que habremos llenado dos veces. Se tendrá que dejar evaporar un 50-60% para concentrar más. En las dos extracciones, aprovechar las mismas flores.

La ventaja que tenemos de las extracciones con alcohol es que podemos evaporar y hacer las concentraciones a nuestro gusto, para poder tomar más o menos gotas.

Conservación y dosificación: El extracto alcohólico se conserva mucho mejor que el de aceite. Guarda sus propiedades durante años.

Cada persona tiene una tolerancia diferente. Y cada extracto, según la calidad de la planta, será diferente. Normalmente, la dosificación es mañana y noche. Por la mañana siempre será menos cantidad que por la noche.

Se aplicaría mezclado con la comida o diluido en agua. Este extracto puede resultar demasiado fuerte debajo de la lengua… Pero se podría hacer. Se empezaría con dos gotas por la mañana y tres por la noche. Eso sí, cada persona tiene que encontrar su dosis.

Estos dos formatos de extractos se pueden utilizar por vía interna y externa.

En vía externa (tópica), en vez de aceite de oliva se podria utilizar aceite de almendras o de otro tipo. Para vía externa, el alcohol no es necesario que sea alimentario. Aún así, siempre es mejor hacerlo con aceite de oliva o alcohol alimentario, para tener siempre las dos opciones: interna y externa.

Por vía externa, a parte de ser beneficioso para cáncer de piel, quemaduras y cicatrices, es fantástico para el dolor reumático y muscular, ya que es un gran calmante y aintiinflamatorio.

Para hacer un preparado para uso externo, se podrían utilizar ambos tipos de extracto.

El alcohol, al ser más concentrado, tendrá más propiedades, pero se evaporará más rápido a la hora de hacer masajes a la piel; el aceite tendrá una textura más grasa y las aplicaciones cutáneas se realizarán mejor.

Una opción para mejorar la calidad del preparado para uso externo sería mezclar aceite con alcohol, una vez realizados individualmente como se ha explicado más arriba. En la solución a base de aceite de oliva se puede añadir, a parte de Cannabis, romero, árnica, harpagofito o cualquier otra planta con propiedades antiinflamatorias. Al mezclar aceite y alcohol, las texturas quedan separadas ya que tienen diferente densidad. Para evitar eso, agitar antes de usar.

 

Microdosis de Cannabis: 

Las microdosis se utilizan para tratar diferentes enfermedades a través de la administración de una solución hidroalcohólica de tinturas de plantas medicinales o inclusive medicamentos de patente, en cantidades equivalentes a la milésima parte a cinco veces menos de la dosis usualmente recomendada.

La dosificación de las microdosis es la siguiente:

• Normalmente se toman cuatro veces al día, tres gotas debajo de la lengua.
• En caso de enfermedades graves o en estado agudo, se pueden administrar tres gotas debajo de la lengua cada 5-10 minutos durante una hora, después tres gotas cada hora, y pasadas las 24 horas, seguir con la dosificación normal.

 

Las microdosis se pueden utilizar con cualquier planta. No hay riesgo de intoxicación, no tienen efectos secundarios y colaterales, no crean dependencia ni adicción, son compatibles con cualquier medicina y/o terapia alternativa y se pueden reforzar con cualquier tratamiento. Se utiliza con plantas fuertes o con cierta toxicidad, o para facilitar la ingestión.

Para hacer las microdosis se tendrá que hacer la tintura o extracto alcohólico que se ha explicado anteriormente. Ésta sería la tintura madre para realizar este preparado.

 

Preparación

• Tener la tintura madre de Cannabis.
• Tener un recipiente, mejor en cuentagotas, con el vehículo que será el transmisor, el que ayudará a hacer llegar las funciones de la planta a nuestro cerebro. El vehículo estaría formado por 2/3 partes de agua y 1/3 de alcohol. Si tenemos un gotero de 30ml, 20ml de agua por 10ml de alcohol.
• Una vez el recipiente esté lleno del vehículo, se añadirá la tintura madre. En este caso, de 10 a 30 gotas para cada 10ml. Cada planta tiene diferentes toxicidades o diferente calidad y cantidad, como en el caso del Cannabis. Por eso varía la cantidad de gotas de tintura madre por 10ml.